Poemas de Silvia Ortiz
ESTE DÍA DUELE
Solo vivir ya cuesta mucho
y este día duele,
duele la andanza
en la mueca eterna de los mares,
duele la mano en los ojos del volcán,
las calles en el tapiz dorado
en la tierra fresca.
Tus ojos en la burbuja de mi copa
y este día duele
sí, que duele.
Duele el bamboleo de tus sales
zozobrando mi garganta,
la reserva de un quejido.
Otro adiós en la doncella apagada
un verso inacabado,
la condena bajo el hombro nada quieto,
el vapor en tu mirada.
¡ay tesoro mío!
quédate otra vez
en el zócalo afiebrado de mis besos,
quédate tejiendo juegos
que no entiendo,
los naipes bajo el mar
en el remolino dormido de tu boca.
Silvia Ortiz, La Fresa de Tu Boca, 2015
***
XLIII
Hay una espina silenciosa
enclavada en el sereno de mi talle.
Una escarcha alucinada por la luz
de figurillas celestiales en los santos.
Hay una espina desprovista de amor
replegada de ausencias en los ojos de mi alma.
Hay lujurias de la tarde en los pasos del amante
y comadrejas en las viñas de los sauces.
Hay silencios que no cantan, que no duermen,
silencios en las calles ya sin hálito continuo.
Mucho fango en mi boca cuando duermo
abrazada siempre desnuda.
Hay días de reposo en canastos limoneros
en las salas de las casas, y en las calles
recogiendo cada paso.
Hay tiempos detenidos en el fuego de la espalda
¡los hay, los hay!
Hay cantos en las palmas de mis manos,
en las lluvias del sol amenazante
los pies descalzos de los huertos.
Hay intuiciones que circundan nuestros libros
nuestros versos, nuestras quejas.
Hay abanicos en las noches
y desconsuelos en los vientos que te alejan
que te ausentas.
Hay una espina amado mío
lesionando mi inocente espera…
Silvia Ortiz, © Copyright, 2017